El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, disfruta desde hoy de unas jornadas de descanso en la comarca del Salnés, en Pontevedra, donde junto con su familia pasará unos días en una casa de turismo rural.
Tras aparcar ayer la agenda institucional por unos días, con el despacho con el Rey en Palma de Mallorca, el jefe del Gobierno se ha desplazado hoy a su tierra natal.
Rajoy ha llegado cerca de las 18.00 horas en una comitiva formada por tres coches y rodeado de amplias medidas de seguridad.
Allí, en la parroquia de Besomaño, en el municipio de Ribadumia (Pontevedra), se ubica el establecimiento de turismo rural "A casa de Alicia" y tan solo lo esperaban los agentes policiales y algunos medios de comunicación.
A diferencia del año anterior, este año el presidente del Gobierno no se dejará ver en su primera jornada de vacaciones, han informado fuentes de su entorno.
Estas mismas fuentes han indicado que Rajoy quería pasar sus días de asueto con su mujer y sus dos hijos en algún lugar de su tierra, modesto y tranquilo, y por ello, aconsejado por el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, de origen ribadumiense, se ha decantado por este asentamiento de solo tres habitaciones.
Tiene dos terrazas exteriores, salón con chimenea, 3.200 metros cuadrados de jardín y una piscina con vistas a la Ría de Arosa.
La casa se ubica cerca de uno de los lugares preferidos de Rajoy para pasear, la Ruta de la Piedra y del Agua, que discurre entre los molinos de Barrantes y el monasterio de Armenteira.
Durante años, cuando todavía era ministro, Rajoy ya descansaba en alguna ocasión en un pazo en Ribadumia, que le cedía el fallecido Luis Carlos Boullosa, registrador de la propiedad al igual que el presidente del Gobierno.
A Casa de Alicia es una empresa familiar, está abierta todo el año y en julio y agosto los precios son de temporada alta, 270 euros por noche la casa completa.