Las reclamaciones presentadas por los clientes de las entidades financieras ante el Banco de España volcieron a subir en 2012 tras la ruptura del año anterior y ascendieron a 14.313, cerca del máximo histórico.
En 2012 se recibieron 43.647 nuevos casos, de los que 29.334 fueron consultas, 26.566 de ellas telefónicas, y las otras 2.768, por escrito.
El número, un 20,7 % superior al del pasado año, se acerca al máximo histórico registrado en 2010, cuando recibió 14.760 escritos de reclamaciones o quejas.
Durante el pasado año se emitieron 7.122 informes, de los que 2.838 fueron favorables al reclamante y 2.372 a las entidades, mientras que en el resto de los casos no se llegó a difundir por estar incompleta la documentación, ser competencia de otras instancias o haber dado traslado del expediente a otros organismos supervisores.
Asimismo, a los informes favorables al reclamante hay que sumar 1.525 allanamientos, aquellos casos en los que las entidades dieron la razón al cliente una vez iniciado el correspondiente informe.
Del total de esos informes favorables, en 519 casos las entidades rectificaron su decisión inicial.
En este sentido, el Banco de España considera que esta proporción de rectificaciones «resulta claramente insatisfactoria».