El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ha mostrado en Oviedo partidario de «amputar sin ninguna duda» cuando haya sospechas «fundadas» de corrupción hacia un cargo público y ha abogado por «meter miedo al que tenga tentaciones».
En su intervención durante el encuentro monográfico titulado «Ganarse otra democracia para ser más Europa» que se celebra en Oviedo, Rubalcaba ha lamentado que la percepción social sea que cuando hay corrupción en el PSOE «es del PSOE» y cuando afecta al PP «es de los políticos».
Así, el líder socialista ha incidido en la importancia de la prevención para profundizar en la transparencia que consiste, ha advertido, en que «se sepa todo» y que «todo el mundo pueda hurgar en todo» en el ámbito público «lo que hará que la gente se corte».
Rubalcaba ha situado la lucha contra la corrupción entre el conjunto de medidas que hay que poner en marcha para afrontar las reformas institucionales e internas en el ámbito de los partidos para salir de la actual crisis económica con una democracia «fuerte» y superar el desapego de la ciudadanía.
A su juicio, la negativa coyuntura económica ha «amplificado» los defectos del modelo democrático actual que requiere que se afronte reformas «bastante deprisa y bastante a fondo», dado que las instituciones políticas españolas tienen que sufren «aluminosis» y es necesario cambiarlas, pero «sin tocar las vigas maestras».
«Hay quien piensa en la derecha que basta con que acabe la crisis para que los problemas desaparezcan, pero nosotros creemos que no, que necesitamos una democracia fuerte y no salir con una democracia débil», ha subrayado.
En el ámbito interno del PSOE, Rubalcaba ha reiterado que esta formación tendrá elecciones primarias abiertas para elegir a su candidato en las próximas elecciones generales tal y como se aprobó en el último Congreso, aunque todavía habrá que definir «cómo se hacen».
A su juicio, los socialistas siempre han sido el partido «más democrático» de España lo que hace que vean «con estupor» el sistema seguido para reemplazar a Antonio Basagoiti al frente del PP vasco, un proceso que los militantes del PSOE no aceptarían y ha subrayado: «Yo mismo rompería el carné si me imponen al secretario general».
Rubalcaba ha lamentado además que el PP se dedique de forma sistemática a «ningunear» las propuestas del PSOE como las que ha presentado para impulsar el crecimiento y la creación de empleo o la relativa a la «profunda» reforma fiscal que necesita España «para que se repartan los esfuerzos de forma justa».
Así, ha puesto como ejemplo al presidente francés Francoise Hollande por comparecer en rueda de prensa «durante dos horas y media y sin plasma» para explicar sus propuestas para el futuro de la UE y para impulsar un plan de empleo juvenil.
Según el líder socialista, sería bueno que «todo el mundo» se planteara los cambios que propugna el PSOE para mejorar la calidad democrática, lo que requiere consenso y evitar, de forma paralela, que el PP siga deteriorándola con sus actuaciones.
Entre ellas, ha mencionado la eliminación de concejales prevista en la reforma de la Ley de Régimen Local o la supresión de los sueldos a los diputados en Castilla-La Mancha «lo que retrotrae a la época en la que, para hacer política, había que tener dinero».