El Barómetro de Opinión del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del pasado mes de septiembre refleja un aumento de la preocupación por los tres principales problemas que, según los ciudadanos, padece España: el paro, la situación económica y la clase política, con la particularidad de que este último marca su cota más alta de la democracia.
El desempleo vuelve a ser mencionado como primer problema de España, a figurar en el 79,3 por ciento de las respuestas de los encuestados, un punto más que lo marcado en el sondeo anterior, del mes de julio, pero por debajo de las cifras del 83 y el 84 por ciento que registraba a principios de año.
Algo similar ocurre con los problemas de índole económica, mencionados en septiembre en el 49,4 por ciento de las respuestas, tres puntos más que antes de verano, pero por debajo de los registros de principios de año, que rondaban el 53 por ciento.
Ahora bien, la concepción de la clase política como un problema sigue una línea ascendente que en septiembre rompió techo, marcando un 26,9 por ciento, un punto más que en julio y nueve pu8ntos por encima del dato de enero.