Una gran cacerolada, de más de una hora de duración, ha puesto el broche casi final en la Puerta del Sol, de Madrid, a los actos conmemorativos del primer aniversario del 15-M, en los que han participado desde el sábado decenas de miles de «indignados» para protestar contra la clase política y financiera.
Pasadas las seis y media de la tarde, más de dos mil «indignados» se congregaban en el kilómetro cero de la capital, el emblema de este movimiento, para participar en este acto, al que se han ido sumando poco después numerosas personas.
Cantando el «cumpleaños feliz» al únisono, numerosas personas se han ido uniendo a este acto, en el que no han dejado de escucharse lemas como «Esta crisis no la pagamos» o «Que no, que no nos representan».
Jóvenes, mayores y niños han hecho sonar cacerolas, llaveros y otros objetos como forma de alzar su voz contra la crisis, los mercados financieros, las políticas de austeridad y los recortes.
Detenidos
A lo largo de los cuatro días, en Madrid, ha habido casi una treintena de detenidos, algunos de ellos puestos en libertad con cargos y otros conducidos ante el juez acusados de delitos de atentado a agente de la autoridad y resistencia y desobediencia.
Mientras, cuatro españoles se encuentran entre los dieciséis «indignados» detenidos ayer por la policía griega tras acampar durante la noche en la céntrica Plaza de Syntagma en Atenas, informaron fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores. Al parecer, los españoles detenidos reciben asistencia consular, según las mismas fuentes.