La Ertzaintza dejará de usar pelotas de goma como material antidisturbios a partir del 1 de enero de 2013, a raíz de la muerte del joven bilbaíno Iñigo Cabacas a consecuencia de un pelotazo, según ha anunciado hoy el consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares.
Ares ha comparecido en la Comisión de Interior y Justicia del Parlamento Vasco para dar explicaciones sobre la muerte del joven Iñigo Cabacas que, según los resultados del informe preliminar de la autopsia, fue fruto del impacto de una pelota de goma en los incidentes registrados en Bilbao el pasado jueves.
Durante esta comparecencia, el director de la Ertzaintza, José Antonio Varela, ha revelado que la pelota lanzada por policías autonómicos que provocó la muerte de Iñigo Cabacas se disparó a más de 22 metros y, por lo tanto, no a «bocajarro».
Varela se ha encargado de hacer el relato de los hechos conforme a la investigación abierta por el departamento, aunque ha precisado que todavía no se pueden ofrecer conclusiones definitivas.
Ares ha asumido «la responsabilidad política» de lo que ha calificado como «doloroso e inesperado suceso» provocado por «una negligencia o una fatalidad» y ha pedido perdón a la familia y amigos del fallecido.
Además, ha asegurado que «tendrá respuestas en el marco del ordenamiento jurídico por la acción de la Justicia y también por la aplicación del reglamento interno de la Ertzaintza».
«Vamos a investigar a fondo para llegar hasta el final cueste lo que cueste y le cueste a quien le cueste», ha dejado claro el consejero.