La dirección de Spanair quiere tener resuelto en 30 días el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que ha planteado para sus 2.600 trabajadores, al tiempo que da casi por seguro que éstos deberán recurrir a Fogasa para cobrar las indemnizaciones por despido.
Estas son las dos principales informaciones que la dirección de la aerolínea, de la que se ha declarado hoy el concurso voluntario de acreedores, ha hecho llegar a los representantes de los trabajadores en la primera reunión oficial que han mantenido este mediodía.
Al término del encuentro, el representante en el comité de empresa de USOC, el sindicato mayoritario, Jordi Mauri, ha explicado a los periodistas que la empresa cree que el periodo de consultas para el ERE se iniciará en las próximas jornadas y que podría darse por cerrado en unos 30 días.
Los trabajadores urgen el ERE porque cuanto antes se cierre, antes podrán regularizar su nueva situación y cobrar el subsidio por desempleo, aunque todo está ahora en manos del juez que tramita el concurso y del administrador concursal designado.
Los sindicatos, que han pedido la implicación de la Generalitat como primer accionista de Spanair para poder cobrar la parte de las nóminas que se les adeuda, han convocado una primera movilización con carácter más general para el próximo nueve de febrero.