El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha decidido dar libertad a todos los comercios madrileños para que puedan abrir a cualquier hora, todos los días del año, sea cual sea su superficie, para crear así «una seña de identidad» que demuestre que esta región «no tiene miedo a la libertad».
Así lo anunció ayer la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que aprobó el anteproyecto de Ley de Dinamización del Comercio madrileño, para someterlo a las consultas correspondientes y para su posterior remisión a la Asamblea, con el fin de que entre en vigor la próxima primavera.
El anteproyecto modifica el borrador presentado en octubre pasado, que concedía libertad de apertura y de horario solo a los comercios con menos de 750 metros cuadrados de superficie.
Sin obligar a nadie
Ahora, y según explicó el consejero de Economía y Hacienda, Percival Manglano, se concede libertad absoluta a cualquier establecimiento para elegir cuándo quiere abrir al público «sin restricción de horarios ni de sectores» y «sin obligar a nadie a nada».
El consejero precisó que esta medida incluye la libertad para que los comercios madrileños puedan vender alcohol o tabaco las 24 horas del día, los 365 días del año.
En cuanto a la ampliación de este permiso a todos los establecimientos independientemente de su superficie, Manglano explicó que se ha adoptado a petición de la patronal, que consideraba que limitar la medida a ciertos comercios significaba «segmentarla» y que crearía «confusión» a comerciantes y consumidores.