Los cabecillas de la 'trama Gürtel', según el informe de la Fiscalía Anticorrupción, Francisco Correa y Pablo Crespo, se negaron ayer a declarar ante el magistrado que instruye este asunto en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León por el posible cobro de comisiones ilegales por una obra en León.
Ambos se limitaron a explicar a puerta cerrada ante el magistrado, una representante de la Fiscalía Anticorrupción y varios letrados de los imputados la razón de su negativa, amparada por el derecho a no declarar, al estar citados en calidad de imputados.
En ambulancia
Mientras Correa llegó en ambulancia a la sede judicial, aunque se bajó de ella y accedió al edificio por su propio pie, Crespo lo hizo en un vehículo camuflado conducido por un guardia civil.
Venían directamente de la cárcel de Soto del Real (Madrid), donde se encuentran en prisión preventiva por otras piezas del 'caso Gürtel'.
Los dos llegaron esposados, aunque les quitaron los grilletes durante el tiempo que permanecieron en el interior del edificio judicial, algo más de una hora.
Tanto a la entrada como a la salida, Crespo mostró las esposas, a las que se refirió como «los grilletes de Rubalcaba», al tiempo que levantaba ambas manos.