El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró ayer que la «credibilidad de Bildu disminuye cada día en el que no pide la disolución de ETA» y añadió que el Gobierno no va a «relajar la política antiterrorista».
Rubalcaba respondido así al planteamiento realizado el sábado por el portavoz de Bildu, Peio Urizar, de «disminuir» la presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y del Ejército en el País Vasco y aseguró con contundencia que «si no tienen los votos y no cambian las leyes, la respuesta es no».
El vicepresidente primero le recordó a la coalición abertzale que hay que respetar las reglas democráticas, que son muy «sencillas»: «La ley se cumple, si la quieres cambiar tienes que tener los votos y si uno compromete una cosa y no lo hace al final lo paga muy caro», al tiempo que le dijo a Bildu que mucha gente les votó pensando que era para lograr el fin de ETA.
Rubalcaba afirmó que, aunque tiene la impresión de «que se aleja la sensación de terror» que durante «mucho tiempo» se ha vivido en el País Vasco, «lo importante ahora es no equivocarse» y, por ello, insistió en que «lo peor que podríamos hacer es relajar la política antiterrorista».
«Vemos el final y cuando uno ve el final los últimos pasos son muy importantes», concluyó.
También el lehendakari, Patxi López se refirió ayer a este asunto, afirmando que «el Gobierno va a asegurar que se cumpla la legalidad» porque «la democracia en sí misma es respeto a las leyes». «No podemos volver a tiempos en que, mirando para otro lado, aquí se cometían cualquier tipo de actos ilegales», refiriéndose a la retirada de símbolos como la bandera española o el retrato del Rey en algunas instituciones vascas gobernadas por Bildu.
Por su parte, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, afirmó ayer que, con la presencia de Bildu en los Ayuntamientos, ETA tiene «más poder que nunca en su historia», y por ello ha exigido al Gobierno que no tenga «ni un gesto de conciliación» con la banda. El popular ha mostrado su «preocupación» por el «crecimiento del poder» en el País Vasco de Bildu, una coalición que «ya está mostrando quiénes son: Batasuna, pero con más poder», dijo.
El portavoz de Unión Progreso y Democracia (UPyD) en el País Vasco, Gorka Maneiro, ha ido más allá y ha pedido la ilegalización de Bildu porque «se ha demostrado que es la representación política de ETA». «Tras las iniciativas que han venido impulsando desde que gobiernan media Euskadi como retirar la bandera española, prohibir el acceso a las casas consistoriales a los escoltas, o las manifestaciones de apoyo a presos etarras, exigimos su ilegalización», indicó.