El líder del PP, Mariano Rajoy, ha anticipado hoy que habrá cambio político en España porque su partido está preparado para gobernar, y «da igual» quien sea el candidato del PSOE en las próximas elecciones generales, «si Zapatero, Rubalcaba, Pepiño o la Chacón».
«Nos trae sin cuidado si el candidato será Zapatero, Pepiño -alusión al ministro de Fomento, José Blanco-, Rubalcaba o la Chacón. Es que nos trae sin cuidado, ese tema ha perdido ya toda su importancia y no voy a perder un segundo en eso».
Con estas palabras, en la reunión de la Junta Directiva del PP de Castilla-La Mancha, el presidente de los populares se ha mostrado así de convencido de la victoria de su partido en las próximas elecciones generales. «Aquí va a haber un cambio político», ha afirmado.
Sobre todo después de la subida de los precios de la luz (un 9,8 por ciento), del gas (el 3,9) y de los billetes del AVE o de la red de Cercanías (entre el 2,3 y el 4,8).
Para Rajoy, las decisiones de ayer de la Comisión de Asuntos Económicos supone «una nueva, e injusta, vuelta de tuerca a la maltrecha economía de los españoles.
Gobierno moderado
En una situación así, al PP le queda trabajar para «construir un Gobierno moderado, centrista, integrador y reformista» en el que todos los ciudadanos puedan sentirse representados, ya que ha llegado un momento en el que en España no pesan tanto las diferencias ideológicas como el malestar por un Ejecutivo, el de Zapatero, que es «incompetente para gestionar los problemas públicos».
Rajoy ha vuelto a pedir elecciones generales, pero ha dejado claro que mientras esa decisión no tenga lugar, el PP defenderá unas prioridades esenciales: «austeridad total», en lo que los populares colaborarán, como ya están haciendo en las comunidades que gobiernan; y favorecer la circulación del crédito.
Ha abogado nuevamente por reducir los niveles de déficit y de deuda, pero incidiendo en que la tarea corresponde principalmente al Gobierno central, pues soporta el techo más alto de endeudamiento.
El PP encarna «una manera distinta de hacer las cosas», así que es urgente el cambio político, que Rajoy ve claro al margen de quien sea el candidato socialista, sobre lo que se especula mucho, también en las filas del PSOE.
Porque, según sus declaraciones, «todo el mundo está de acuerdo» en que el mayor obstáculo para la recuperación económica es el Gobierno y la falta de confianza que genera dentro y fuera de España, por lo que el consumo y la inversión, así como los préstamos a empresas españolas, se resienten.
Para el presidente del PP es «lógico» que no haya confianza en el Gobierno de Zapatero, ya que «cambia de criterio cada media hora».