El ministro de Fomento, José Blanco, ha confiado este sábado en que en el transcurso de las próximas 24 ó 48 horas se pueda recuperar la normalidad en los aeropuertos españoles, si bien reconoció que habrá muchos vuelos que ya no podrán reanudarse por haber «caducado» el deseo de viajar de muchos ciudadanos.
«Si los controladores, que están movilizados a todos los efectos, cumplen con su trabajo podemos estar hablando de 24 ó 48 horas para recuperar la normalidad», ha afirmado en declaraciones a la cadena Ser.
Blanco aseguró que la situación ha empezado a recuperarse con la salida de algún vuelo, aunque la normalización del tráfico aéreo llevará «algún tiempo» porque exigirá la reprogramación de los planes de vuelo, en colaboración con Eurocontrol, AENA y las propias compañías aéreas.
«En los centros de control y torres hay personal suficiente para reanudar el servicio, esperemos que esto sea posible en las próximas horas, ya que prácticamente la totalidad de los controladores se han ido incorporando a sus puestos a lo largo de la mañana y de manera gradual», afirmó, para insistir en que a pesar de la presencia de los efectivos recuperar la normalidad requerirá activar mecanismos que llevarán su tiempo.
Blanco indicó que no le consta que se haya abierto algún expediente entre los controladores por no incorporarse a su puesto, lo que no quiere decir que no se haya producido, al margen de situaciones anecdóticas como la de algún efectivo que no se encontraba en su ámbito de trabajo y no ha podido incorporarse por no poder viajar.
En cualquier caso, el titular de Fomento fue contundente al afirmar que AENA abrirá todos los expedientes administrativos correspondientes, «como ya viene haciendo» desde que empezaron las dificultades que han derivado en la publicación del decreto.
«El poner en dificultades al espacio aéreo con una decisión muy grave, de consecuencias muy graves para la ciudadanía y para un sector estratégico, también tiene consecuencias desde el punto de vista penal. Seguiremos adelante con nuevos expedientes, también hay una actuación de la Fiscalía, por lo tanto, no les puede salir gratis.», zanjó.
Un antes y un después
Blanco reconoció que Fomento era consciente de que los controladores querían «una situación de estas características para chantajear al Gobierno y mantener sus privilegios», ya que ayer mismo el colectivo les hizo llegar una propuesta de convenio que suponía volver a los «privilegios» anteriores a la nueva normativa.
El titular de Fomento afirmó que «hay un antes y un después» en la relación entre AENA y sus controladores y en sus «condiciones abusivas», ya que han pasado de cobrar 350.000 euros a 200.000 euros al año, cifra, apuntó que «equivale a 32 millones de las antiguas pesetas al año», salario que cobran «muy pocos» ciudadanos en nuestro país.
«Es verdad que costará mucho renunciar a estos privilegios, pero estoy seguro de que al final conseguiremos que la racionalidad impere», apuntó.
En esta línea, admitió que dentro del propio colectivo existen diferentes posiciones, aunque «la tensión y el nerviosismo» entre los controladores era generalizada. «Hay mucha gente entre el colectivo que quiere cumplir con su trabajo y que es muy consciente de que esta situación era insostenible», señaló.
Los ciudadanos, «la prioridad»
Blanco, quien pidió de nuevo disculpas a los ciudadanos que se han visto perjudicados y a sus familias, afirmó que en todo momento han sido la prioridad del Ejecutivo defender el interés general.
Preguntado por la posibilidad de que la apertura de expendientes a los controladores que no se incorporen añada dificultad al caos en los aeropuertos por la falta de efectivos, señaló que el Gobierno irá dando respuesta a todos los problemas sobrevenidos, para lo que se han constituido diferentes grupos de trabajo.
«Lo más importante ahora es que se restablezca la normalidad, después de haber tomado unas medidas sin precedentes, como no podía ser de otra manera ante un chantaje sin precedentes», agregó, para añadir que en todo momento se actuará con «frialdad, determinación y firmeza para seguir defendiendo el interés general».