El presidente del Consejo Asesor del Observatorio Regional contra la Violencia de Género de Madrid, Jesús Neira, le pidió ayer a la presidenta regional, Esperanza Aguirre, que «ejerza su función» y le destituya de su cargo porque él no dimitirá.
El profesor Neira aseguró que él es «éticamente intachable» porque no ha «transgredido la ética», por lo que no piensa abandonar la presidencia del Consejo.
«Le diré claramente (a Esperanza Aguirre) que ejerza su función, es decir, que me cese porque yo éticamente soy intachable, no he trasgredido la ética y, por tanto, no dimito ni voy a dimitir», así que «le agradecería enormemente que me cese porque no quiero estar en esta situación», señaló.
No obstante, Neira afirmó que no quiere continuar «en esta situación ni seguir en el cargo» porque está «hasta el gorro de historias que son indignantes», y ha agregado que su detención por conducir bebido le parece «un montaje de cabo a rabo».
«Moralmente, éticamente ¿he pisado la ética de la sociedad? Es que es verdaderamente terrible», se lamentó.
Seguir tomando copas
Tras manifestar que seguirá tomándose «las copas» que le «de la gana» bajo su «absoluta responsabilidad», ha dicho que «lo único» que ha ocurrido es que ha dado «una tasa de alcoholemia en condiciones terribles de una medicación».
Naturalmente, ha continuado, «eso choca con la seguridad, la libertad y la vida de los demás, y como no hay que poner en peligro semejante cosa, desde hace muchísimos años he utilizado el taxi cuando he tomado unas copas con mis amigos o, en caso de que fuéramos a una reunión entre matrimonios, mi mujer conduce y punto», ha aclarado.
Neira, que se ha definido como «una persona normal que ha dedicado su vida el estudio y a la universidad», ha añadido que «jamás» se ha considerado «un ídolo ni un héroe ni nada por el estilo».
Jesús Neira fue condenado ayer por conducir ebrio a la retirada 10 meses del carné y multa de 1.800 euros. En el juicio, Neira, que también ha sido condenado a realizar trabajos en beneficio de la comunidad durante 40 días, sí ha reconocido el «dato objetivo de que la prueba de alcoholemia dio el resultado que dio» -0,87 miligramos por aire aspirado, más del triple de lo permitido (0,25)-, explicó su abogado, Javier Gómez de Liaño.