El Ministerio de Economía, a través de la Dirección General de Seguros (DGS), ha tomado el control provisional de la aseguradora catalana Agrupació Mútua por el alto riesgo de sus inversiones inmobiliarias, que quiere reorientar para proteger su consolidado negocio asegurador. La DGS, que dirige Ricardo Lozano, sostuvo ayer que la sustitución de los órganos de administración de la mutua de seguros por dos expertos del sector «salvaguardará los intereses» de sus más de 380.000 clientes y garantizará el normal funcionamiento de la compañía, que podrá seguir prestando servicios y suscribiendo pólizas de seguros con normalidad.
Según fuentes cercanas a la DGS, esa actividad aseguradora se había puesto en riesgo por culpa de los «préstamos y las participaciones inmobiliarias» de Agrupació Mútua (fundamentalmente en AMCI Habitat, AMCI BD y AMCI Rehabilitació). La «gestión deficiente» obligaba a realizar provisiones millonarias que hubieran situado bajo mínimos los requisitos legales para que la compañía siguiera funcionando.
De hecho, Agrupació Mútua cerró el pasado ejercicio con unas pérdidas oficiales de 13,5 millones de euros, si bien la auditora BDO cuestionó en junio pasado estos resultados e instó a la mutua a dotar provisiones por 60 millones más para cubrir el riesgo asociado a AMCI Habitat, promotora inmobiliaria participada en un 70% por la entidad.
Agrupació Mútua, cuyas cuentas estaban siendo inspeccionadas por la DGS desde julio, estaba presidida por Josep González desde septiembre, en sustitución del empresario Félix Millet, que dimitió el julio tras conocerse que estaba siendo investigado por la Fiscalía por el posible desvío de 2,3 millones de euros de los fondos de la Fundació Orfeó Catala-Palau de la Música, que también presidía.