El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se conjuró ayer contra el paro garantizando todos los esfuerzos en la lucha contra el desempleo, anunció nuevas iniciativas contra esta lacra y aseguró que no dejará a ninguna familia «tirada en la cuneta».
Zapatero se expresó así en su intervención en el acto organizado por el PSOE en Madrid con más de mil alcaldes del partido.
El discurso del jefe del Ejecutivo giró en torno a la lucha de su Gobierno frente al paro, y sus únicas referencias al Partido Popular fueron para criticar que no votase a favor de este plan.
«El Gobierno de España, de todos los españoles, es hoy, ante todo, el Gobierno de las personas que pierden su empleo, de las familias con más dificultades», enfatizó antes de garantizar que va a poner todos los medios y todos los recursos para luchar contra el paro y para proteger a los afectados por el desempleo.
De ahí que expusiera un compromiso: «Os puedo asegurar que el Gobierno no dejará a ninguna familia tirada en la cuneta, seguirá aumentando la protección social y favoreciendo las oportunidades ante el desempleo».
Codo con codo
En esa línea, aseguró que el Ejecutivo continuará el trabajo «codo con codo» con empresarios y sindicatos para favorecer el empleo, adoptará nuevas iniciativas con ese objetivo y dará protección social a las familias con más necesidades.
El jefe del Ejecutivo recalcó que la crisis no puede servir y no va a servir, «como a algunos les gustaría» para deteriorar las condiciones del trabajo y los derechos de los trabajadores, ni tampoco para facilitar el despido.
Por eso, el presidente instó a contar con los sindicatos para garantizar el trabajo digno, de la misma forma que dijo que el Gobierno va a contar con ellos y con los empresarios en la lucha contra el paro porque no la puede acometer a solas.