CARLOS MÍNGUEZ-MADRID
Para ellos, de momento, no hay crisis. Al contrario, las ofertas de trabajo para médicos, enfermeras, pastores, mecánicos, carpinteros, electricistas o fontaneros, entre otras profesiones y oficios, no han dejado de crecer en unos meses en los que el paro atrapa ya a más de 2'6 millones de personas. Y las previsiones a corto plazo no son precisamente optimistas. Según la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal (AGETT), 2008 acabará con unos tres millones de desempleados. Pero, ante tan negro panorama, hay empresas y profesiones a los que la crisis golpea con menos intensidad e, incluso, parece beneficiarles. Aunque «lo peor, el tsunami, está por llegar», asegura Carlos Martín, economista de Comisiones Obreras. «Se espera -insiste- un ajuste duro del empleo y un aumento de la economía sumergida».
El último Catálogo de Ocupaciones de Difícil Cobertura, elaborado por el Servicio Público de Empleo Estatal, el antiguo Inem, una pista para conocer las necesidades del mercado laboral en un momento de crisis como el que vivimos, constata la demanda que hay de médicos, profesionales de la enfermería, fisioterapeutas, protésicos e higienistas dentales, pero también de pastores, mecánicos de todo tipo e, incluso, de empleados de servicios funerarios.
«La sanidad española, tanto pública como privada, -aseguran en Adecco, empresa de trabajo temporal- asiste a un importante déficit de médicos y enfermeras que hace imposible encontrar al número suficiente de trabajadores en nuestro país».