El nuevo presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Carlos Dívar, aprovechó ayer la apertura del año judicial para reclamar que los jueces sean escuchados en los proyectos de reforma de la Justicia, al tiempo que reclamó respeto «a ultranza» por la independencia de uno de los pilares de la democracia.
Una vez dado por concluido el acto, los asistentes irrumpieron en aplausos, y el micrófono, que quedó abierto durante unos segundos, permitió a los periodistas escuchar la reacción en el nuevo presidente. «Creo que me aplauden a mí, ¡eh!», dijo Dívar, a lo que el juez Ramón Trillo, presidente en funciones del Tribunal Supremo, respondió: «Fíjate, ni se han sentado, bueno, es que ahora ya eres el jefe, coño».
Durante su discurso ante el Rey y tras la intervención del fiscal general, Cándido Conde-Pumpido, Carlos Dívar no pudo más que referirse a su nuevo cargo como presidente del CGPJ y del Tribunal Supremo, que asumió apenas cinco horas antes, y aseguró a los presentes que emprende esta labor con «humildad» y «prudencia».
«Vengo con sincera humildad y con prudencia en mi corazón, como deben afrontarse todas las grandes responsabilidades en esta vida», dijo. Así, manifestó «el inmenso honor» de «tan alta magistratura» y mostró su respeto y admiración a los magistrados del Alto Tribunal que desde ahora presidirá y del nunca había formado parte.