La crisis hace mella en el sector de la automación con una importante caída de la demanda y las compañías prevén ajustes en sus plantillas y en su producción. La dirección de Ford España ha anunciado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) «temporal» en la factoría de Almussafes (Valencia) que afectará a unos 1.300 trabajadores y prevé eliminar el turno de noche.
En la misma línea, la dirección de General Motors (GM) España pretende suprimir durante un año, a partir del próximo noviembre, un total de 600 contratos en la planta de Figueruelas (Zaragoza). Por otra parte, la dirección de Seat y los sindicatos han acordado suspender el turno nocturno de producción de la línea de modelos Altea y León, lo que supondrá dejar de producir unos 300 coches al día, aunque en este caso la medida no afectará a la plantilla.
Un portavoz de la dirección de Ford España ha recalcado que el ERE se aplicará sólo durante el último trimestre de este año y con él se pretende hacer frente a la «caída tan brutal del mercado». Esa caída, añadieron las mismas fuentes, comenzó a notarse desde principios de año pero se ha agudizado a partir del mes de julio, sobre todo en la exportación al mercado europeo.
Prioridad
La misma razón arguye la dirección de GM España para suprimir durante un año 600 contratos en Figueruelas. La medida, que comenzará a negociarse la próxima semana, afectará principalmente al personal de manufactura de la planta, que da empleo a unas 7.500 personas y produce de manera simultánea el Opel Corsa, el Combo y el Meriva. El comité recibió con «sorpresa» esta medida, que la compañía justifica en la caída de la producción en un 10%.
La dirección de Seat y los sindicatos acordaron suspender el turno nocturno de producción de la línea de modelos Altea y León, lo que supondrá dejar de producir unos 300 coches al día, aunque la medida no afectará a la plantilla ya que la adaptación de personal se hará mediante la bolsa de horas. La empresa y los sindicatos han acordado este ajuste de la producción, que empezará dentro de dos semanas y, de momento, será indefinida, ante el descenso en la venta de automóviles, que ha caído más del 22%.