El Gobierno está estudiando un paquete de medidas de control para los presos por delitos de terrorismo que vayan a salir de prisión tras cumplir su condena y no se hayan reinsertado con el objetivo de proteger a las posibles víctimas.
Así lo explicó a los periodistas el ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, en relación a una información publicada por el diario «El País» que señala que el PSOE y el PP están estudiando este tipo de medidas.
Bermejo, que participó en el curso de verano «Derechos fundamentales y Justicia Penal» de la Universidad Complutense, ha señalado que este control y vigilancia se podría establecer también para los presos por pederastia que tampoco estén reinsertados.
Fernández Bermejo precisó que lo que se va a hacer es un análisis profundo de las posibilidades, dentro de la Constitución, para adoptar medidas «posdelictuales» y, según el ministro, «hay un ámbito que recorrer», incluso en el aspecto civil. «Esas medidas nos permitirían actuar ante pronósticos negativos de reinserción y optar por medidas limitativas de libertad y harían también que nadie pudiera disfrutar de bienes si tiene una condena que implica responsabilidades civiles», indicó.
Respecto a los delitos de terrorismo, según reiteró el titular de Justicia, se estudian medidas «posdelictuales y de intervención respetuosas con la Constitución», medidas para proteger a las víctimas y para ver «cómo podemos ser más eficaces en la materialización de la responsabilidades civiles por vía de intervención en los patrimonios de los terroristas». «Yo celebro que el PP ya no hable de la cadena perpetua», afirmó Fernández Bermejo, quien se mostró a favor de «articular medidas de limitación de libertad posdelictuales». Se trataría de establecer, detalló, mecanismos de vigilancia, que pueden ser directos o se pueden articular a través de medidas electrónicas. «Hay un amplio margen de medidas», apuntó el ministro, quien incidió en la importancia de que se creen herramientas legales que permitan llevarlas a cabo. Además, el Gobierno también estudia este tipo de medidas para los pederastas porque, según dijo Fernández Bermejo, a Justicia le preocupa qué ocurre cuando el agresor cumple la pena, un campo que también cuenta con un pronóstico negativo de reinserción.