La Generalitat de Catalunya está estudiando el transporte de agua en tren para hacer frente a la situación de sequía que sufre Catalunya y evitar el trasvase del Segre, según indicó ayer el consejero catalán de Medio Ambiente y Vivienda, Francesc Baltasar, en el Parlament.
Baltasar tuvo que hacer frente ayer a tres interpelaciones sobre agua que le plantearon los grupos del PP, ICV-EUiA y ERC, y, durante la primera, aseguró que la Conselleria de Medi Ambient i Vivenda está «analizando el transporte vía ferroviaria de más aportaciones de agua». «Todo vale en la lucha contra la sequía», aseveró Baltasar, y añadió que se estudian también muchas más posibilidades, como el transporte por barco. Si todas estas medidas sumadas no fueran suficientes sería cuando el Govern llevaría a cabo una «aportación temporal» del Segre, explicó.
Sin embargo, dejó claro que «en ningún caso» se pondría en peligro el caudal ecológico y el funcionamiento normal de los usos del Segre. Para ello, se planteará a las autoridades locales y comarcales esta operación, con la Universitat de Lleida como árbitro. Remarcó que la obra se retiraría inmediatamente, como máximo en mayo, y no generaría «ninguna distorsión» en el riego porque tendría lugar fuera de temporada.
Esta comisión integrada por las autoridades locales y comarcales y el Govern permitirá estudiar si es adecuado el punto del río del que se pretende extraer el agua y la dimensión de la captación.