El ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, aseguró ayer que el Gobierno central está «continuamente observando» a Acción Nacionalista Vasca (ANV) para comprobar «si resiste el test democrático».
En declaraciones en Barcelona, dijo que la investigación sobre la ilegalización de ANV está en proceso: «No es nada nuevo que hayamos empezado ayer y hoy». «No hemos dejado de hacerlo, estamos continuamente observando este proceso social y político y lo miramos con los ojos que hay que mirarlo, los de la democracia», insistió.
En este proceso, Bermejo dijo que «están ayudando los acontecimientos de los últimos días» ya que desde ANV «no han sido capaces de reproducir lo que está en sus estatutos, la condena al terrorismo como cántico a la democracia».
El ministro recordó que cuando haya pruebas «de la conexión entre ANV y ETA, al minuto siguiente se habrá interpuesto la demanda» para ilegalizar la formación. «Lo he dicho muchas veces», añadió.
Por su parte, el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, denunció ayer la falta de honestidad por parte del PSOE en el proceso de paz, con su formación y en especial con su antecesor, Josu Jon Imaz. Urkullu quiso dejar claro que, para los miembros de su partido, el PNV sólo fue utilizado como «celestina» entre la izquierda abertzale y el Gobierno, un hecho que, explicó, se demuestra cuando los socialistas les invitaron a conversaciones, ya que éstas «ya estaban enquistadas», por lo que, apunta, «se nos invitó para lavar esa imagen».
«No ha habido una actitud honesta por parte del PSOE», explica el líder nacionalista en una entrevista concedida a 'El País', en donde señala que el único pago recibido por la colaboración de Imaz en el proceso han sido «halagos» por parte de los socialistas.
«Nosotros dimos cobertura al proceso personificado en Imaz, porque era el presidente de la ejecutiva, arriesgando y abriendo las puertas del PNV, pero ¿cuál ha sido el pago que ha recibido Josu Jon más allá de los halagos?», denuncia Urkullu, quien cree asimismo que este hecho ha tenido para el ex dirigente un alto coste en términos internos.
«Nosotros hemos defendido, Josu Jon ha defendido, la transversalidad, el cautivar a España, eso que tanto se le ha denostado internamente, y eso tenía que ver con la normalización política más que con la pacificación», subraya, para preguntarse «¿qué desarrollo del autogobierno ha habido?, ¿cuál ha sido el pago que ha recibido Josu Jon? Cero, reiteró.