Las acusaciones entre Gobierno y oposición no cesan durante la precampaña para las próximas elecciones generales que se celebrarán el próximo año. Así, tras las contínuas críticas de miembros del Partido Popular contra los Presupuestos Generales del Estado (PGE) acordados el pasado viernes por el Consejo de Ministros, la vicepresidenta, María Teresa Fernández de la Vega, quiso dejar claro que «no ha habido una sola Comunidad Autónoma que haya visto mermadas sus necesidades». Por ello, acusó al PP de mentir al asegurar que el Ejecutivo no invierte en las comunidades donde no gobiernan los populares.
De la Vega insistió en que el Ejecutivo «jamás» se ha visto condicionado por el partido que gobierna en cada comunidad por lo que acusó a los populares de «querer hacer creer que damos más a unos que a otros».
Como no podía ser de otra forma, la vicepresidenta alabó las políticas de igualdad del Gobierno y aseguró que el Ejecutivo de Zapatero ha mostrado, durante su primera legislatura, «la voluntad de progreso frente al fatalismo conservador de los de siempre». Por ello, criticó al PP porque, a su juicio, sus miembros son «conversos de la igualdad» y «siguen faltando a la verdad».
Para De la Vega, el 14 de marzo de 2004, los socialistas alcanzaron el poder «porque nos comprometimos con los ciudadanos a construir una España mejor, un país más moderno, con una estructura más adaptada a las realidades y necesidades de nuestros tiempos».
En cambio, para la vicepresidenta en el PP «la injusticia y la discriminación siempre se han cubierto por el discurso conservador bajo el manto de lo natural», afirmaciones que realizó tras alabar la lucha del movimiento feminista a lo largo de los años y advertir de la existencia de un «pensamiento inestable» en los sectores «más conservadores» de la sociedad.