BELÉN ANCA LÓPEZ/MURCIA
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, le dijo ayer a José Luis Rodríguez Zapatero que para hacer frente a la corrupción «empiece a barrer su propia casa» tras los casos de Marbella, Eivissa, la Oficina Económica del presidente del Gobierno y la CNMV y si no lo hace, le advirtió, «a callar».
Rajoy participó en el segundo día de campaña electoral en sendos mítines en el Teatro Principal de Alicante por la mañana y en la Plaza de Toros de Murcia por la tarde, en los que habló de corrupción para responder a Zapatero.
El presidente del Gobierno expresó el viernes en la capital murciana su compromiso de luchar contra la corrupción urbanística y aseguró que se perseguirá a quienes «pretendan lucrarse a través de un ayuntamiento o de cualquier otro sitio».
En Alicante, ante unas 1.500 personas, y en Murcia, ante unas 11.000, calculado en base al aforo posible de la Plaza de Toros, Rajoy criticó que Zapatero «no se comprometa ni con el AVE, ni con el agua, ni con la sanidad, ni con la seguridad ciudadana» y «hable de corrupción, pero no de Marbella, Eivissa, la CNMV, Arenillas, Sebastián y la Oficina Económica del presidente del Gobierno».
Además, Rajoy criticó que Zapatero hablara en Murcia de corrupción y no citara a los Alcázares, a los concejales de Totana, «condenados por decir lo que no debían decir del alcalde del PP», a los de Molina de Segura y a los de Marbella. «Otros no pueden porque los suyos están en la cárcel», matizó. Rajoy garantizó que él se puede «fotografiar» con «todos y cada uno de los militantes del PP de Murcia». «¿Puede decir lo mismo ese señor al que habéis mencionado?», preguntó, en referencia a Zapatero. El presidente del PP expresó su convicción de que los actuales presidentes de la Comunidad Valenciana y Murcia, Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, respectivamente, ganarán las elecciones del 27 de mayo, al igual que lo harán los alcaldes de Alicante y Murcia, Luis Díaz Alperi y Miguel Àngel Cámara, respectivamente.