OTR/PRESS-BARCELONA/BILBAO
El líder de Batasuna, Arnaldo Otegi, afirmó ayer que sería «un error construir un Estado independiente desde la lucha armada o desde la imposición armada». Un postulado esperanzador, pero que no viene acompañado de una condena de la violencia por parte del dirigente de la formación ilegalizada, que además aseguró que la Ley de Partidos no recoge esta condición para que puedan estar en las elecciones el próximo mes de mayo y criticó la «poca ambición histórica» de los que exigen que Batasuna se desmarque de forma expresa e inequívoca de la violencia de ETA.
«No es posible construir un proyecto independentista si no es por las vías democráticas», afirmó Otegi que se mostró «absolutamente seguro» de que el fin de la banda terrorista no es imponer un Estado independiente en Euskadi sino que «lucha por que considera que en estos momentos no hay condiciones democráticas para que un proyecto independentista se pueda construir desde medios democráticos».
En todo caso el dirigente de Batasuna quiso dejar claro que «esa es su opción», la de ETA, de la que se desmarcó y aseguró que para su formación sí hay «una oportunidad abierta» para plantear sus objetivos políticos mediante cauces democráticos. Pero Otegi no condenó la violencia de ETA e incluso fue más allá al criticar la «poca ambición histórica» de los que insisten en reclamar a Batasuna que condene las acciones armadas de la banda terrorista «cuando lo que está encima de la mesa es la solución al conflicto».