Los presuntos autores materiales del 11-M, Basel Gahlyoun y Abdelmajid Bouchar, negaron ayer haber estado en el piso de Leganés en el que se suicidaron siete presuntos responsables de la masacre, pese a que el ADN de ambos fue hallado en un gorro y en unas bolsas de basura, respectivamente, que se encontraron entre los restos de la vivienda.
A este respecto, Ghalyoun explicó que en el gorro en el que fue encontrado su perfil genético fue hallado también el «de más personas» y consideró que uno de los suicidas de Leganés, Rifaat Anouar, con el que convivió una temporada en la vivienda de la calle Virgen del Coro, pudo habérselo cogido y por eso apareció en el piso de Leganés.
En cuanto a las huellas de Bouchar, «El Gamo», éste sostuvo no haber estado en dicha vivienda, de la que supuestamente huyó corriendo tras detectar la presencia policial cuando bajó a la calle a tirar la basura el día en que se suicidaron los terroristas. Sin embargo, Bouchar, para quien la fiscal, al igual que para Ghalyoun, pide 38.654 años de cárcel, al ser preguntado por qué aparecían huellas suyas en bolsas de basura y en huesos de dátil que se encontraban en su interior dijo que se negaba a contestar.
También, y coincidiendo con Ghalyoun, negó haber estado en la finca de Morata de Tajuña (Madrid) en la que supuestamente se montaron las bombas que se colocaron en los trenes, pese a que sus huellas aparecieron en una chapa encontrada en ese lugar.