Las especulaciones y las teorías conspiranoicas en torno a la autoría de los atentados del 11 de marzo en Madrid seguirán teniendo cabida, pero menos, en lo que al capítulo de explosivos se refiere. Los ocho peritos policiales que han examinado las muestras del explosivo utilizado en los atentados del 11 de marzo en Madrid concluyen en el borrador del informe encargado por la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia Nacional que todas aquellas recogidas en los focos de explosión de los trenes contienen dinitrotolueno, sustancia que puede estar presente en distintos tipos de dinamita, como la Goma 2 Eco, la Goma EC o el Titadyne.
Del informe se extrae que la mencionada sustancia estaba también presente en las muestras de explosivo intacto recogidas en la bolsa-bomba desactivada en el distrito de Puente de Vallecas, en la vivienda de la calle Carmen Martín Gaite de Leganés, donde se suicidaron siete terroristas, y en la furgoneta Renault Kangoo, en la que se transportaron las bombas.
Otra de las sustancias detectada en los análisis de las muestras es el nitroglicol que figura en la composición de los restos de explosivos de las estaciones de Atocha, El Pozo y Santa Eugenia y en los restos de tres bolsas de plástico localizadas durante el registro de la finca de Morata de Tajuña (Madrid) utilizada por los autores de los atentados para preparar las bombas. Esta sustancia forma parte también de la composición de distintas dinamitas, incluyendo tanto la Goma 2 Eco como el Titadyne.
Las muestras recogidas en los focos de las explosiones fueron tratadas en las dependencias de los Tedax con agua y acetona, según especifica el borrador del documento hecho público ayer.