El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, escribió ayer el penúltimo capítulo de la polémica surgida con la biografía de Esperanza Aguirre al asegurar que no conocía 'el Tamayazo' antes de que se produjera, tal y como se dice en el libro. Además le hizo un claro reproche a la presidenta de la Comunidad al asegurar que no iba a ser él «el que iba a hacer nada que perjudicara a su partido a seis meses de las elecciones».
Y es que, independientemente del contenido de la polémica, parece claro que es inoportuna.«No creo que estén contentos con la publicación del libro los dirigentes de mi partido ni las personas que las hay, y muchas, cercanas a Esperanza», declaró ayer en Telemadrid el vicealcalde de Madrid, al que por cierto se le menciona en el libro como «el esclavo» de Gallardón.
En la misma dirección, apeló a la prudencia y la responsabilidad y a no hablar mucho del tema puesto que a seis meses de las elecciones, Esperanza Aguirre, Alberto Ruiz Gallardón y Mariano Rajoy «se juegan mucho».
«El libro puede dejar contento al PSOE, a IU y a nuestros adversarios», subrayó. Cobo aseguró que muchas de las cosas que se dicen en relación a Gallardón y a él mismo «no son verdad» ni mucho menos toda la verdad».