Buenas noticias relativas a vivienda, pero no para los que compran sino para los que felizmente cancelan sus préstamos hipotecarios. El Gobierno ha decidido suavizar las condiciones para que la subrogación o cancelación de los prestamos sea más económica, así que se rebajará al 0,5% la comisión máxima por cancelación anticipada de la deuda al tiempo que se disminuyen en más de un 40% los aranceles registrales y notariales. Pero esta no valdrá para todos los hipotecados: la nueva ley, que entrará en vigor en 2007, afectará únicamente a los nuevos contratos que se realicen. En consecuencia, liquidar una hipoteca nos saldrá más barato a partir del año que viene.
La reforma de la Ley Hipotecaria, que no tendrá carácter retroactivo, contempla una rebaja de los costes notariales y registrales en las cancelaciones, novaciones y subrogaciones de hipotecas, ya que las bonificaciones de que ahora disfrutan se elevarán al 90% en todos los casos (el tomador del préstamo sólo pagará el 10%), frente al 75% actual.Además, en el caso de los aranceles notariales, los documentos de cuantía que existen en las escrituras y que tienen un coste determinado por un porcentaje de cada 1.000 euros, se sustituyen por «documentos sin cuantía», que suponen una cantidad fija, con un mínimo de 90 euros, lo que, supondrá una rebaja de los costes notariales para los titulares de hipotecas.