EFE-BARCELONA
Los partidos catalanes de izquierda (PSC, ERC e ICV-EUiA) criticaron ayer, con diferentes argumentos, la postura de CiU en su acercamiento al PSOE en los Presupuestos del Estado, mientras el candidato del PPC, Josep Piqué, se quedó en el último momento sin la presencia de Mariano Rajoy en Barcelona.
La tercera jornada de la campaña para las elecciones al Parlament del próximo 1 de noviembre se centró en la «resaca» del gesto de CiU el miércoles en Congreso, cuando retiró su enmienda a la totalidad a los Presupuestos a cambio de una reformulación del cálculo de las inversiones en Catalunya a pactar con el Gobierno catalán que salga de las urnas.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no cree que la decisión de CiU de retirar la enmienda a la totalidad de los Presupuestos para el próximo año tenga efectos electorales ni a favor ni en contra de esta formación o del PSC.Zapatero se expresó así en una breve conversación con informadores en los pasillos del Senado tras participar en la sesión de control al Gobierno del pleno de la Cámara. Al ser preguntado por la posible influencia que pueda tener en las elecciones catalanas la retirada de la enmienda de CiU durante el debate de totalidad de los Presupuestos celebrado ayer en el pleno del Congreso, el jefe del Ejecutivo expresó su opinión de que no cree que afecte de ninguna forma.
No obstante, el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, aseguró ayer que el PSC se quedó ayer «con un palmo de narices» tras la retirada de la enmienda a la totalidad de CiU a los Presupuestos, aunque negó cualquier indicio de «sociovergencia», algo que sería «pasarse de rosca».