EFE-SANTA CRUZ DE TENERIFE
El presidente del Ejecutivo canario, Adán Martín, exigió ayer que el Gobierno constituya un gabinete de crisis ante la inmigración que llega a las islas por mar, ya que la situación «es crítica», al tiempo que demandó un reparto de los menores extranjeros con otras comunidades autónomas.
Martín y la consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Marisa Zamora, ofrecieron una rueda de prensa tras la reunión semanal del presidente con altos cargos del gobierno para tratar la evolución de la llegada de inmigrantes en cayucos.
Advirtieron que la llegada de más de 16.000 inmigrantes a las islas desde el principio de este año hace que este sea un problema «de todo el Estado español» y también de Europa. «Si llegaran a las costas de la Península habrían sentido el problema más cercano», subrayó Martín.El presidente canario incidió en particular en la situación de los menores extranjeros y en la necesidad de repartirlos de manera proporcional entre todas las regiones, ya que los recursos autonómicos «están desbordados», al acoger actualmente Canarias a 649, con un coste anual mínimo de 18 millones de euros.