MADRID. EUROPA PRESS.
La banda terrorista ETA remitió esta noche un comunicado al periódico Gara en el que asegura que, cinco meses después de la declaración de alto el fuego permanente, el proceso está «inmerso en una crisis evidente» y culpa a PSOE y PNV de ese «bloqueo» ya que, según afirma, «pretenden construir un proceso a la medida de sus intereses y necesidades». Advierte, además, de que «si continúan los ataques contra Euskal Herria, ETA responderá». Según el comunicado la organización considera que los dirigentes de los partidos políticos «no han respondido a la medida de su responsabilidad» ya que «en vez de dar pasos profundos para alimentar ese proceso y para construir un marco democrático en Euskal Herria, han actuado obcecadamente para desgastar las posiciones de la izquierda abertzale». Calificando el actual momento como de «gravedad», la organización subraya que el Gobierno «se ha valido de la represión para debilitar a la izquierda abertzale», por medio de «continuos ataques» desde «los aparatos del Estado» y reprocha a PSOE y PNV que estén «demostrando una voluntad clara para retrasar los pasos a dar», mientras «imponen nuevas condiciones a la izquierda abertzale». ETA denuncia que ambos partidos intentan «desvirtuar y vaciar de contenido el proceso», identificando «la situación abierta con el fin de ETA y con que la izquierda abertzale admita dócilmente el marco actual». La banda realiza una crítica directa al PSOE asegurando que este «quiere desarrollar su propio modelo de Estado y convertir el proceso en un mero instrumento para continuar en el poder». Como consecuencia, y según el comunicado, el proceso está «en un impasse». La responsabilidad de PSOE y PNV, según ETA, es «más grave si cabe», porque «en un contexto en el que está en juego el futuro de Euskal Herria, está prevaleciendo la tentación de hacer caso omiso a este futuro en favor de sus intereses». En su comunicado, la organización terrorista afirma que el PSOE y el PNV «no han demostrado todavía una voluntad clara de responder mediante la negociación y el acuerdo a los nudos que hay que desatar en este proceso» y que su actitud es la de «distanciarse de los compromisos adquiridos» y «poner nuevos obstáculos para que Euskal Herria se trabe en el fango del marco de negación y división». Les pregunta, en ese sentido, si «tienen intención de dejar que el proceso se pudra». Esta crisis, reitera la organización, se debe a la «actitud mezquina de los partidos políticos que no han tomado decisiones profundas en el camino de reconocer a Euskal Herria un marco democrático». La organización considera que mantener una actitud «represiva es incompatible con el desarrollo de un proceso de negociación», y por ello advierte de que «si continúan los ataques contra Euskal Herria, ETA responderá». En su comunicado, se reafirma en los objetivos que apuntó en su declaración del pasado 22 de marzo, e insta a «adoptar compromisos y decisiones claras en esa dirección». LLAMAMIENTO A LA PRESIÓN POPULAR La banda hace también un llamamiento general a la ciudadanía vasca para que «acumule fuerzas» y ejerza «una presión popular con el fin de alcanzar una situación democrática basada en los derechos de Euskal Herria». Aboga, en ese sentido, por «levantar todos esos límites que hoy en día se imponen a Euskal Herria para llegar a una verdadera situación democrática» y subraya que «ésas son las cadenas de la dependencia que los ciudadanos vascos tenemos que soltar». La organización cita entre los signos de represión «la ocupación de las calles, los controles y amenazas de las fuerzas armadas, los secuestros de ciudadanos vascos y la vulneración de los derechos civiles y políticos de la izquierda abertzale». Sitúa también entre esos ataques «las medidas de excepción» que se están adoptando contra el colectivo de presos políticos vascos, así como la «persecución contra los exiliados políticos», unas situaciones que, según subraya, «se han mantenido durante los últimos meses».
ETA declara en un comunicado que el proceso de paz está en crisis