EFE-BILBAO
La desconvocatoria oficial de la manifestación de este domingo en San Sebastián ha llevado al juez Baltasar Garzón a dictar una nueva providencia en la que cita como imputados a cinco dirigentes de Batasuna, por asumir «en exclusiva» la marcha que, al haber sido desconvocada, se ha convertido en «un acto ilegal».
José Luis Sayes Alzua, la persona que convocó a título individual la manifestación con el lema «Euskal Herriak du hitza eta erabakia» (Euskal Herria tiene la palabra y la decisión), presentó ayer en la comisaría de la Ertzaintza de San Sebastián un escrito desconvocando la misma.
Sin embargo, el dirigente de Batasuna Pernando Barrena -que el pasado sábado anunció públicamente esta marcha- dio por hecho ayer que el próximo domingo se celebrará la manifestación, porque tiene «un gran sentido» ante las «agresiones» que sufre, a su juicio, la izquierda abertzale.
Barrena, que en ningún momento se refirió a la desconvocatoria de la marcha, se limitó a culpar al PSOE de las actuaciones judiciales contra Batasuna y llamó a la ciudadanía y al «resto de agentes» políticos a que «se impliquen en la denuncia de quien se empeña en obstaculizar ese proceso político».
Tras tener conocimiento de la desconvocatoria de la marcha y del contenido de la rueda de prensa de Barrena, el juez Garzón dictó una providencia en la que cita para hoy como testigo (y no como imputado como había dictado ayer) a José Luis Sayes Alzua.
Garzón cita también para hoy como imputados a Barrena y a Elkano por haber asumido «el protagonismo sobre el anuncio» de la marcha el pasado sábado en una rueda de prensa, «en cuyo acta anunciador aparecía el anagrama» de la formación ilegal
Ahora el juez extiende estas citaciones a las otras tres personas que, además de Elkano, acompañaron ayer a Barrena en la rueda de prensa.Se trata de los presuntos miembros de la Mesa Nacional de Batasuna Aizpea Abrisketa Puyo, Asier Arraiz Barbadillo y Mikel Zubimendi Berastegui. Todos ellos deberán comparecer en la Audiencia Nacional para ser interrogados en calidad de imputados.
El llamamiento a la participación en esta manifestación para el domingo en San Sebastián a pesar de su desconvocatoria oficial despertó reacciones divergentes entre las fuerzas políticas.
Desde el Partido Popular, su secretario de Libertades Públicas, Ignacio Astarloa, exigió al Gobierno que «haga todo lo que tiene que hacer» para evitar la marcha y advirtió de que si finalmente no se impide pedirán «las responsabilidades legales que haya lugar». La diputada de EA, Begoña Lasagabaster, aseguró que el Gobierno central y Batasuna están «forzando» la situación, ya que las últimas actuaciones respecto a la marcha del domingo en San Sebastián «perjudican» el proceso de paz, porque «las posiciones extremas no son buenas».