El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, afirmó ayer que las víctimas civiles en los ataques israelíes contra Líbano no pueden ser consideradas como «daños colaterales» sino que son un «objetivo buscado» por Israel. Blanco expuso la posición de este partido ante el conflicto de Oriente Medio y dejó claro que el PSOE condena las acciones terroristas del grupo libanés Hezbolá, así como la «desproporcionada respuesta de Israel y sus ataques indiscriminados contra la población de Líbano».
Al término de la reunión de la Comisión Permanente del Comité Federal del PSOE, Blanco dio lectura a una declaración de cinco puntos en la que este partido muestra, además, su apoyo a la iniciativa del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, de enviar una fuerza internacional de interposición a la zona del conflicto.
El dirigente socialista aprovechó para criticar al líder del PP, Mariano Rajoy, del que aseguró que «no le interesa» lo que pasa en el Líbano porque «sólo le interesa, como siempre, insultar al presidente del Gobierno de España».
El primer punto con el que el resumió la posición del PSOE ante el conflicto deja claro su condena a las «acciones terroristas» de Hizbolá y considera que la crisis se desencadenó «por sus provocaciones», que los socialistas repudian, al igual que el posterior lanzamiento de misiles contra territorio israelí.
A renglón seguido, el PSOE condena «la desproporcionada respuesta de Israel y sus ataques indiscriminados contra la población del Líbano» y remarca que «no se está atacando a Hezbolá, se está atacando a todo un país y a sus habitantes indefensos». En este apartado, Blanco añadió que en esta crisis «los muertos civiles no son daños colaterales, son un objetivo buscado». Además, recordó que, como ya dijo el PSOE ante la guerra de Irak, «ninguna razón estratégica o política justifica la agresión masiva ni la destrucción de un país».
El tercer punto emplaza a la comunidad internacional a «iniciar acciones» para exigir un alto el fuego «inmediato» con el propósito de «devolver la crisis al ámbito de la diplomacia».
En cuarto lugar, la dirección socialista plantea que la ONU «asuma lo antes posible» el control de la situación y apoya la iniciativa de Kofi Annan de enviar «cascos azules» a la zona. Por último, el PSOE subraya que la UE «debe estar a la cabeza de la búsqueda de la paz».