El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, pidió ayer «calma» ante la expectativa generada sobre el momento en que comparecerá en el Congreso para comunicar el inicio del diálogo con ETA y apurará el plazo del mes de junio fijado por él mismo para hacer efectiva esa información.
Zapatero avanzó semanas atrás que antes de que concluyese el mes de junio acudiría al Congreso para dar cuenta del inicio de los contactos con la banda terrorista tras el alto el fuego permanente anunciado el pasado 22 de marzo.
A la espera de que se desvelaran esas incógnitas, se barajó la posibilidad de que Zapatero aprovechase la sesión de control al Gobierno celebrada ayer para cumplir ese trámite o dejase su comunicación para hoy, en la última jornada de pleno ordinario antes de las vacaciones parlamentarias de verano.
La primera de esas opciones no fue la elegida por el presidente del Gobierno, quien al ser preguntado por los informadores a su llegada al Congreso sobre el momento de la comparecencia, se limitó a pedir «calma, calma».No despejó tampoco dudas cuando apenas tres cuartos de hora después de llegar a la Cámara, y tras responder a cuatro preguntas en el hemiciclo, abandonó el Congreso sin ni siquiera confirmar que no iba a volver ya en esa jornada para llevar a cabo esa comunicación.
Fuentes del Gobierno sí descartaron posteriormente que Zapatero fuera a regresar al Congreso y reiteraron la vigencia del compromiso de Zapatero de informar a los grupos parlamentarios en lo que queda de mes de junio.
Es decir, Zapatero debería hacer esa comunicación hoy o el viernes, aunque en esta última jornada es cuando se celebra el Consejo de ministros y ya no hay sesión parlamentaria habitual.