La nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía, creada por la Ley Orgánica de Educación (LOE) y que ya ha sido criticada por el PP, versará sobre una «triple dimensión»: la formación afectivo-emocional, la convivencia con el entorno y la participación en la vida institucional y política. El ministerio de Educación y Ciencia (MEC) se reunirá mañana con organizaciones del mundo educativo implicadas en este tipo de formación con el fin de concretar de forma más específica las directrices «más específicas», objetivos y criterios de evaluación en desarrollo de la LOE. En concreto, el currículum de esta materia contendrá la formación para «el bienestar de uno consigo mismo» y la ubicación en su entorno más cercano, la convivencia con el centro escolar, la familia y los amigos, además de la participación ciudadana en cuestiones de ambito municipal o autonómico. También incluirá educación intercultural, señaló que todas las consultas evidencian que estos contenidos para la nueva asignatura van en la dirección correcta. Además, el representante del MEC concretó que las enseñanzas de este área, que se impartirán en el último ciclo de Primaria, uno de los tres primeros cursos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y en cuarto, además de en 'Filosofía y ciudadanía' del Bachillerato, se tratarán «en relación con un planteamiento evolutivo», es decir, en función de la evolución de los estudiantes porque «no es lo mismo un niño de 10 años que un adolescente de 15 y tampoco el planteamiento puede ser idéntico».
La recién nombrada ministra de Educación, Mercedes Cabrera, que participó en un acto del PSOE para hacer balance de estos dos años de Gobierno, se refirió a la reforma educativa y aseguró que se basa en un concepto de «calidad para todos». Así, afirmó que con la nueva normativa, el sistema educativo alcanzará «niveles de excelencia». Cabrera, además, se defendió de las críticas del PP sobre la posibilidad de que se establezcan 17 sistemas educativos diferentes en el país.