EUROPA PRESS-VITORIA/MADRID
El presidente del PP, Mariano Rajoy, consideró ayer «una grave
equivocación» el nombramiento de Alfredo Pérez Rubalcaba como
ministro del Interior y advirtió de que no es «una buena decisión
para que haya un buen entendimiento entre el Gobierno y el PP».
Además, lamentó la salida de José Bono del Ejecutivo y lo atribuyó
a «la disconformidad» manifiesta que ha mantenido con el Estatut
catalán.
Rajoy realizó estas declaraciones en el Parlamento Vasco, tras reunirse con el grupo parlamentario de su partido. El líder del PP calificó los cambios introducidos en el Gobierno central de «crisis de Gobierno importante» porque que dos de las tres modificaciones afectan a carteras «tradicionalmente importantes y más en estos momentos», como Defensa e Interior.
Además, señaló que estas medidas adoptadas por José Luis Rodríguez Zapatero se deben a que el Ejecutivo socialista «no tiene programa y va gobernando a salto de mata».En su opinión, la sustitución de José Antonio Alonso por Rubalcaba «no es una buena noticia», ya que «tiene muchos puntos negros en su biografía», aunque rechazó concretar a qué se refería.
Sí fue más concreto el portavoz adjunto del Grupo Popular, Vicente Martínez Pujalte, quien dijo que el ministro del Interior de Alfredo Pérez Rubalcaba, fue «el portavoz del Gobierno en los años duros del GAL» y «paladín de la utilización de un atentado terrorista (11-M) con fines partidistas».
Martínez Pujalte indicó que el nombramiento de Rubalcaba genera «intranquilidad» y «desasosiego» en su partido, pues cree que «va a tener todos los resortes del poder» en el Gobierno. Según explicó, Rubalcaba fue «el portavoz del Gobierno socialista en los años de los GAL» (grupo terrorista que operó contra ETA desde los aparatos de seguridad del Estado) y «en los años más duros del PSOE» en el Gobierno de Felipe González.
También le definió como «paladín de la utilización de un atentado terrorista con fines partidistas» por su actuación en los días que fueron desde el 11-M y las generales del 14-M de 2004.
En su opinión, con Rubalcaba en Interior ahora habrá «serias dificultades para conocer la verdad del 11-M». Su conclusión es que dar «todas las claves» a Rubalcaba es «una concesión al proyecto radical y al nacionalismo más rupturista». «¿Qué tranquilidad podremos tener los españoles?», se preguntó. Tras insistir en que este cambio es una equivocación, Rajoy señaló que José Antonio Alonso «era mucho mejor para abordar los problemas que van a venir, por mucho que hayamos discrepado con él».