OTR/PRESS-MADRID/BARCELONA
«Todo el mundo cabe con el único límite de la violencia». De este
modo, el secretario general del Grupo parlamentario socialista en
el Congreso de los Diputados, Diego López Garrido, realizaba ayer
un llamamiento público a la ilegalizada Batasuna para que aproveche
las circunstancias actuales para integrarse en la vida democrática
porque, tras el comunicado de ETA, «lo tiene más fácil». Desde las
filas populares también se trató el papel que ha de jugar la
izquierda abertzale en el proceso abierto y así, el portavoz del PP
vasco, Leopoldo Barreda, señaló que «el camino más lógico» que
puede tomar Batasuna es crear una nueva formación política «que
deje abiertamente atrás su justificación de la violencia».
López Garrido compareció ante los medios de comunicación en rueda de prensa para comentar la situación política tras el comunicado de ETA y con la vista puesta en la cita que tienen mañana martes en la Moncloa el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con el líder de la oposición, Mariano Rajoy, donde se espera se «consolide» el clima de unidad que parece haber surgido para llegar al fin de la violencia. En este sentido, el secretario de Comunicación popular, Gabriel Elorriaga, señaló que hay una actitud positiva en su partido de cara a la reunión.
El diputado socialista aprovechó la ocasión para animar a la formación ilegalizada Batasuna a que se integre en la vida democrática porque ahora «lo tiene más fácil» tras el anuncio de ETA. «Todo el mundo cabe con el único límite de la violencia. Lo tienen ahora más fácil que antes para integrarse en la vida democrática siempre que se acepten las vías exclusivamente políticas, democráticas y pacíficas», dijo.También ayer desde las filas de la oposición, el Partido Popular, su portavoz en el País Vasco, Leopoldo Barreda se refirió, en respuesta a las declaraciones realizadas ayer por Rodríguez Zapatero en una entrevista a 'El País', al futuro de Batasuna. Barreda afirmó que «el camino más lógico es que se proponga una nueva formación política que abiertamente deje atrás su justificación de la violencia» y, además, consideró que «un escenario así, si representaría un cambio por fin en el mundo ETA-Batasuna».