Durísimo ataque al PP del Alto Comisionado de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo, Gregorio Peces-Barba. A su juicio, los populares han realizado «el mayor ataque en democracia contra el Poder Judicial y su independencia» por sus críticas a la investigación de los atentados del 11-M. Estas descalificaciones, a su juicio, pueden «debilitar las consecuencias del sumario». Peces-Barba, en todo caso, no hablará con el presidente del PP, Mariano Rajoy, ya que, tras las críticas a su nombramiento por parte de los populares, no ve factible un diálogo más que a través de los medios de comunicación.
Peces-Barba aseguró que se ve en la obligación de protestar por las descalificaciones que los dirigentes del PP, «escudándose en la base del 'queremos saber'», están lanzando sobre el Poder Judicial y la Policía por su trabajo en la investigación del 11-M. Estas acusaciones, dijo, «pueden debilitar las consecuencias del sumario» y suponen una «ofensa» para las víctimas, porque dejan de ser el eje del proceso para que lo sean las presuntas lagunas en la investigación. Las víctimas, añadió, siguen «enormemente afectadas», quieren que haya cuanto antes una sentencia firme y «no se merecen semejante comportamiento de la oposición»,
El Alto Comisionado, tras recordar que Mariano Rajoy ha rectificado su pretensión de que se anule el sumario mientras no se aclararan algunos puntos, se detuvo especialmente en la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. Denunció, como ya hizo hace tiempo, que sólo financia a la asociación minoritaria de afectados de los atentados de Madrid, y deja sin ayudas a la Asociación 11-M Afectados del Terrorismo, que preside Pilar Manjón. «Es una tarea más objetiva que el dedicarse a descalificar a los jueces», dijo.
No ve posible Peces-Barba un encuentro con el presidente del PP para pedir al primer partido de la oposición que rectifique su estrategia política sobre el 11-M. El Alto Comisionado recordó que sólo ve factible hablar con Rajoy a través de los medios, puesto que éste, tras el nombramiento del Alto Comisionado, dijo públicamente que eso era una de las peores decisiones que había tomado el Gobierno que preside José Luis Rodríguez Zapatero, junto a la retirada de las tropas españolas de Irak y la de algunas de las estatuas de Franco.