El presidente del PP, Mariano Rajoy, insiste en afirmar que su partido debe mirar hacia el futuro y quiere que la Convención del próximo fin de semana lo demuestre. El líder de la oposición pidió ayer a los 'populares' que el cónclave sirva para escenificar «una renovación de ideas» y no para «recordar tiempos de gloria».
José María Aznar recomendó a Rajoy que utilice sus años de Gobierno como «uno más» de sus activos. «Tuyo y de los que representáis este proyecto que es el mío», añadió.
Rajoy y Aznar hablaron ayer del pasado, presente y futuro del PP en la presentación del libro «Los indicadores del cambio. España 1996-2004», editado por la Fundación para el Análisis y Estudios Estratégicos (FAES), que preside el propio Aznar.
El líder popular mezcló en su intervención el orgullo por esos ocho años de gobierno de su partido con el deseo de mirar hacia el futuro con un mensaje nuevo.
«Debemos sentirnos orgullosos, legítimamente orgullosos, y creo que se debe notar que estamos muy orgullosos de nuestro trabajo de entonces», dijo Rajoy de esos ocho años. Pero también advirtió que «mirar hacia atrás mueve a la melancolía y además es poco práctico». Rajoy aseguró que no desea ser malinterpretado, pero aseguró que «ningún historial político» es capaz de sustituir a «nuevos proyectos e, incluso, si se justifica, nuevas ideas».
El líder 'popular' aseguró que tan solo dos años después de que el PP dejara el Gobierno «España ya es diferente» y eso justifica tratar los nuevos tiempos de forma distinta. Esto, añadió, no implica que el PP «finja ser algo» diferente, algo que «además de inútil sería inmoral». La Convención, añadió, debe presentar a un PP «con el deseo de renovar las ideas de un proyecto liberal que, encabezado por Aznar, hizo posible el cambio».
Rajoy llegó incluso a calificar la reunión del PP del próximo fin de semana como «la plataforma para un nuevo cambio. «No enfrentar, sino reunir.