El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska procesó ayer al preso etarra Henri Parot por los delitos de integración en organización terrorista y conspiración o proposición para cometer estragos terroristas o atentados, que podrían acarrearle una condena de entre 9 y 32 años de cárcel.
El procesamiento de Parot, antiguo integrante del «comando itinerante» de ETA, está relacionado con una carta intervenida a la dirección de la banda en septiembre de 2002, y que supuestamente había sido escrita por el recluso en la cárcel de Córdoba el 1 de junio de 2001, en la que proponía la comisión de nuevos atentados.
De ser condenado en este procedimiento judicial, la excarcelación de Parot, inicialmente prevista para 2011, se retrasaría hasta que cumpliera la nueva pena aún en el caso de que el Tribunal Supremo acceda a refundir en una sola condena de 30 años la totalidad de las 26 penas que le fueron impuestas por delitos cometidos entre 1978 y 1990.En la carta que ha dado origen al nuevo procesamiento, Parot afirmaba que, cuando fue detenido el 4 de abril de 1990 en Santiponce (Sevilla), había decidido ya que sus próximos atentados serían contra el Ministerio del Interior y contra la Audiencia Nacional, y añadía: «no entiendo como no lo hemos volado ya».
Además, proponía a ETA la comisión de atentados contra lo que llama objetivos «vitales» como el Banco de España y las Bolsas de Madrid y Barcelona y decía que «estoy convencido de que si hacéis eso se sentarían a negociar».