El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, expresaron ayer su deseo de que ERC se sume al acuerdo alcanzado ya con CiU, PSC e ICV sobre el Estatuto catalán y consideraron que todavía existe un margen para que puedan aceptar el texto.
Zapatero y Maragall se reunieron ayer durante casi una hora y media en La Moncloa, en la que ha supuesto la última entrevista de la ronda de contactos que ha mantenido el presidente del Gobierno con los partidos catalanes que apoyaron la reforma estatutaria para poder cerrar un acuerdo definitivo. El secretario de Estado de Comunicación, Fernando Moraleda, aseguró tras este encuentro que existe «margen» para que ERC se sume al «resultado final» de la negociación, y confió en que dentro de «algunos días» se pueda concretar esta supuesta incorporación al pacto.
Magarall coincidió en que «hay posibilidades» de que el Estatut sea aprobado por «una mayoría sustancial» en el Congreso y «refrendado también por una mayoría sustancial en Catalunya», y consideró «difícil de imaginar» que ERC se retire del proyecto.
Pese a todo, opinó que la «fidelidad» del partido de los independentistas catalanes es cada vez «mayor», por lo que, a su juicio, las posibilidades de «cambio de alianzas» son «más remotas».
Preguntado por si hay «margen» para arrastrar a ERC al acuerdo, Maragall aseguró que algunos asuntos relacionados con la financiación «pueden manejarse de distintas maneras».
Y añadió, en este sentido, que «algunas cosas habladas pueden facilitar que ERC vea satisfechas algunas de sus pretensiones que en este caso me parecen enormemente razonables».