Una docena de inmigrantes intentaron saltar la valla fronteriza de Melilla durante la madrugada de ayer por la zona de Beni-Emzar, donde tiene sólo 1,5 metros de altura. Siete de ellos consiguieron llegar a territorio español.
El Gobierno desvinculó este asalto de las avalanchas de los meses de septiembre y octubre porque «el grupo es muy reducido». Sin embargo, el líder del PP, Mariano Rajoy, consideró una «pésima noticia» éste asalto, y pidió al Ejecutivo que exija a Marruecos «que cumpla sus obligaciones básicas en derecho internacional».
Los hechos se produjeron en torno a las tres de la madrugada del jueves, en un punto de la valla que cruza un arroyo que en la actualidad está seco y por donde las alambradas tiene sólo un metro y medio de altura. En total, siete subsaharianos lograron entrar en España, aunque lo intentaron doce.Desde la Delegación del Gobierno en Melilla se aseguró ayer que el dispositivo de vigilancia de la valla fronteriza por parte de la Guardia Civil «no se ha relajado en ningún momento».
En los últimos días se han producido asaltos a la valla de Melilla por parte de pequeños grupos de inmigrantes subsaharianos que portaban escaleras hechas por ellos mismos.
El pasado día 22 fueron interceptados en la zona de Vaguada de Linares un total de 14 personas, que se hallaban listas para el asalto en el espacio intermedio entre las dos vallas que separan -a distintas alturas- los territorios español y marroquí. El día de Navidad lograron entrar en España por la zona de Farhana ocho inmigrantes subsaharianos.
En este contexto, Mariano Rajoy pidió ayer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que exija a Marruecos que cumpla con sus obligaciones internacionales, «ya que en la política exterior no vale hacer discursos, no decir nada y proclamar constantemente que todas las cosas van bien».
El presidente del PP, que calificó el asalto de «pésima noticia», confió en que esa exigencia se produzca lo antes posible, «puesto que para eso está el Gobierno, y no para crear líos».