Telefónica ha llegado a un acuerdo para adquirir O2, la segunda compañía de telefonía móvil del Reino Unido y sexta de Europa, por 17.700 millones de libras (unos 26.110 millones de euros). Esta operación es la de mayor envergadura realizada nunca por una empresa española en el extranjero, superando la compra del Abbey National por el Banco Santander. El operador español elevará a 170 millones su número total de clientes, 116 de los cuales corresponderán a telefonía móvil.
Esta compra permitirá a la empresa española entrar en dos de los mayores mercados de telefonía móvil de Europa, el del Reino Unido y Alemania, donde O2 es el tercer mayor operador. Se trata de la mayor adquisición anunciada en el sector mundial de las telecomunicaciones desde la compra de Nextel por parte de Sprint, propuesta en diciembre de 2004, y la más importante en Europa desde mayo de 2000, cuando France Télécom decidió la compra de Orange a Vodafone.
La empresa británica, que fue parte de BT, mantendrá su nombre y seguirá con base en el Reino Unido. El acuerdo pone fin a semanas de conjeturas sobre la venta de O2, que ha sido centro de interés de otras empresas, como la alemana Deutsche Telekom y la holandesa KPN. Telefónica asegura que los derechos actuales de los empleados y directivos quedan totalmente salvaguardados.
La oferta es vinculante y cuenta con el acuerdo unánime por parte de los consejos de administración de ambas compañías. Telefónica, actualmente la tercera compañía mundial de telecomunicaciones por capitalización bursátil, pagará 2 libras por acción, lo que supone una prima del 22% con respecto al precio de los títulos de 02 del 28 de octubre, el último día de cotización.
La oferta está condicionada a la obtención de las autorizaciones de carácter regulatorio que sean necesarias, y a la consecución de más del 90% de las acciones de la compañía, aunque con la posibilidad de que la empresa española se conforme con alcanzar el 50%.