EFE/BARCELONA
El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su homólogo
francés, Dominique de Villepin, avalaron ayer un plan de impulso de
las conexiones transpirenaicas y anunciaron una propuesta conjunta
ante la UE para desarrollar un plan global en materia de
inmigración.
Zapatero y Villepin presidieron en Barcelona una reunión sobre cooperación transfronteriza en la que participaron los ministros de Exteriores, Fomento, Industria y Sanidad de ambos países, así como los presidentes de Cataluña, País Vasco, Aragón y Navarra y los representantes de las regiones francesas de Aquitania, Midi-Pyrénées y Languedoc-Rousillon.
Los dos jefes de Gobierno destacaron la importancia de la misma, el hecho de que en ella hayan participado los dirigentes autonómicos y regionales y el haber llegado a acuerdos con plazos concretos en materia de infraestructuras y de impulso de iniciativas comunes ante la Unión Europea.
En el primer de esos capítulos se enmarca el plan de trabajo sobre conexiones a través de los Pirineos y que, entre sus medidas, prevé para el año 2009 la entrada en funcionamiento de la conexión ferroviaria de alta velocidad entre Figueras y Perpiñán.
Las conexiones ferroviarias entre Vitoria y Dax y entre Zaragoza-Pau, la apertura al tráfico de mercancías peligrosas del túnel de Somport a partir de enero de 2006, y la puesta en servicio en 2010 de la totalidad de la autovía entre Zaragoza y Jaca, y en 2006 del túnel de Vielha, son otras cuestiones incluidas en ese plan.
En cuanto a vías de conexión marítimas, España y Francia firmaron una declaración de intenciones para el impulso de las llamadas «autopistas del mar».