El Gobierno respondía así a la información facilitada el miércoles por el Ejecutivo marroquí, que aseguró que el Rey llamó tres veces a Mohamed VI, para pedirle «ayuda» cuando se produjeron los asaltos masivos a los vallados que separan Marruecos de Ceuta y Melilla.
Mientras, Médicos Sin Fronteras insistió ayer en que unos 1.000 inmigrantes que son trasladados hacia el sur marroquí necesitan urgentemente agua, comida y cobijo e informó de que dos helicópteros de la Misión de Naciones Unidas para el Referéndum del Sahara Occidental (MINURSO) buscan a unos cuarenta subsaharianos abandonados en la zona.
El presidente del PP, Mariano Rajoy, visitó ayer Ceuta e insistió en que el Gobierno «debe transmitir a Marruecos que es una obligación básica por su parte el cumplir con los compromisos de derechos internacionales».
Respecto a la participación del Rey en la crisis, tachó de «grotesco que al final nos enteremos por fuentes del Gobierno de Marruecos de que el Rey ha llamado al Rey de Marruecos y que gracias a esa gestión personal» se han resuelto las repatriaciones.Sin embargo, Moratinos aseguró que Marruecos aceptó la repatriación de 73 inmigrantes a petición del Ejecutivo y, aunque destacó las buenas relaciones entre los monarcas, subrayó que «las decisiones las toman los gobiernos».
Tras la reunión del Consejo de Ministros, la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega negó que las conversaciones entre el Rey y Mohamed VI se produjeran «a instancias» de Zapatero y señaló que «es muy habitual que los reyes hablen de este tema y de cuantos temas están en la vida política de los dos países».