Tras escuchar las explicaciones del ministro del Interior, el PP exigió la dimisión a José Antonio Alonso. Su portavoz de Justicia, Ignacio Astarloa, acusó al titular de Interior de dejar al director de la Guardia Civil, Carlos Gómez Arruche, «al pie de los caballos».
Alonso había respaldado previamente la actuación del máximo dirigente del Instituto Armado, pero no sus declaraciones en torno al caso de Roquetas de Mar.
Del resto de partidos políticos, sólo IU-ICV se reserva el derecho de insistir en la dimisión o cese de Gómez Arruche. Su portavoz, Carme García, aseguró que «esto es tan grave que estoy convencida de que habrá medidas por parte del Ministerio».ERC no pedirá la dimisión del director general de la Guardia Civil, aunque su portavoz, Agustí Cerdà, le reprochó sus primeras declaraciones y sus silencios posteriores. Para el PNV es «precoz» hablar de ceses a estas alturas de la investigación.
Pese a que los partidos aceptaron las explicaciones de Alonso, la Asociación Unificada de Guardias Civiles, la mayoritaria del cuerpo, insistió en pedir el cese de Arruche. El máximo dirigente del Instituto Armado, aseguran desde la Asociación, «tuvo la intención de quitar hierro al asunto».