El PSdeG y el BNG han designado ayer a los integrantes del nuevo Gobierno de Galicia, que presidirá el socialista Emilio Pérez Touriño, con el nacionalista Anxo Quintana como vicepresidente, con competencias en asuntos sociales y relaciones institucionales. La nueva Xunta contará con 12 Consellerías, dos menos que la anterior, que estarán dirigidas por igual número de hombres que mujeres. Pérez Touriño tomará posesión de su cargo, tras la elección el viernes en el Parlamento, el martes y el equipo de Gobierno lo hará dos días más tarde.
Por parte socialista, José Luis Méndez Romeu (A Coruña 1951) será el encargado de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia. Xosé Ramón Fernández Antonio, vigués de 52 años, asumirá la cartera de Economía y Hacienda. Política Territorial, Obras Públicas y Transportes ha sido encargada a María José Caride Estévez (Vigo 1966). La consellería de Educación y Ordenación Universitaria ha sido encargada a Laura Elena Sánchez Piñon (Buenos Aires 1954). La nueva conselleira de Sanidad será María José Rubio Vidal (1956), licenciada en Medicina y Cirugía por la USC. La consellería de Pesca y Asuntos Marítimos será dirigida por Carmen Gallego Calvar (Vilaboa 1966). Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible es la consellería que se ha encargado a Manuel Vázquez Fernández (1954). Ricardo Varela Sánchez (Lugo 1955) se encargará de la consellería de Trabajo, de nueva creación.
En cuanto a los conselleiros del BNG, el departamento de Desarrollo Rural, de nueva creación y que asume la lucha contra los incendios forestales, será dirigido por el licenciado en Matemáticas y profesor de Enseñanza Secundaria Alfredo Suárez Canal.
La consellería de Cultura será dirigida por Anxela Bugallo Rodríguez (A Coruña 1963), doctora en Biología. La conselleira de Vivienda será la hija de emigrantes orensanos, nacida en 1961 en México, Teresa Táboas Veleiro. Fernando Blanco Alvarez (Lugo 1959), ocupará la consellería de Industria, Comercio y Turismo.De otra parte, el presidente de la Xunta en funciones, Manuel Fraga, mostró su satisfacción por los «más de quince años de servicios a Galicia» y afirmó que tras dejar el Ejecutivo gallego le corresponde ahora «tocar otro timbre».