La ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, pidió ayer tranquilidad a la población ante la polémica suscitada por las declaraciones de su colega de Medio Ambiente, Cristina Narbona, y destacó que lo que ésta quiso decir es que en «algunas zonas de España se está regando con aguas de depuradoras, no con aguas fecales».
Además, Espinosa precisó que, incluso en los casos en los que se practica el riego con aguas de depuradoras, se autoriza en unas proporciones determinadas «siempre previo análisis químicos» por parte de las Comunidades Autónomas, «lo cual está perfectamente autorizado».
La ministra de Agricultura confirmó, asimismo, que existe un expediente abierto por parte de Finlandia por un caso de salmonela a causa de una lechuga de variedad iceberg procedente de España. No obstante, Espinosa aclaró que no se puede afirmar que éste se haya abierto «por un tema de contaminación o de riesgo» e, incluso, apuntó la posibilidad de que «esta contaminación se haya producido en la manipulación en el país de origen».«Tenemos toda la documentación y la podemos aportar y quería transmitir tranquilidad a los consumidores porque España es un ejemplo de calidad y tranquilidad alimenticia», añadió la ministra.
El PP ha solicitado la reunión de la Diputación Permenante del Congreso para que autorice la comparecencia de Cristina Narbona con la finalidad de que explique a los ciudadanos que sus manifestaciones sobre posibles riegos en Murcia con aguas fecales «no son ciertas» y salvaguarde así los productos hortofructícolas de esta zona.
Así lo anunció la portavoz del PP en materia de Medio Ambiente en la Cámara Baja, María Teresa Fernández de Lara, para quien las palabras de Narbona fueron «precipitadas, sectarias, inadmisibles y de una gravedad enorme».