El candidato del PP, Manuel Fraga, expresó ayer su preocupación por la demora en la llegada de votos de emigrantes procedentes de Venezuela, ante lo que el PSOE le reclamó serenidad, puesto que en su opinión se están recibiendo los sufragios con normalidad y, de hecho, está aumentando la participación respecto a 2001.
El presidente en funciones de la Xunta se sumó esta mañana al temor expresado ayer por el líder del PP orensano, José Luis Baltar, quien lamentó el «retraso» en la llegada de los sufragios de Venezuela», que a su juicio son favorables al PP.
Manuel Fraga dijo no querer sembrar sospechas, pero consideró que «algo no funciona allí» al demorarse la llegada de sufragios de la emigración en aquel país. Los votos de los emigrantes, que se recuentan el próximo lunes, serán cruciales para determinar la mayoría de Gobierno, al estar en juego el escaño número 38 en la provincia de Pontevedra, que provisionalmente el PP perdió.
El candidato popular indicó que la ralentización del voto de Venezuela «se han hecho ya unas gestiones», pero «las excusas que se han dado hasta ahora no parecen satisfactorias» aunque dijo que no quiere con estas palabras alegar «mala voluntad». Respecto a las palabras de algunos dirigentes socialistas, que apuntaron la posibilidad de que también esté en juego un escaño en la provincia de Ourense, que opinan puede decantarse al PSOE tras el recuento, Manuel Fraga apuntó que «no sé si lo creen, lo han indicado». En su opinión, así como en Pontevedra puede haber dudas «serias», pese a que los populares creen posible que se resuelva a favor del PP, el caso de Ourense tiene menos posibilidades pero «nada impide que estemos equivocados».Las palabras de Fraga supusieron la rápida reacción del PSdeG, que le reclamó «serenidad» por generar «desasosiego» en relación al voto emigrante, que en opinión de los socialistas está llegando con normalidad.