EFE/EUROPA PRESS-MADRID
El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska acordó
ayer noche prisión eludible con fianza de 400.000 euros por
integración en ETA como dirigente, en la causa seguida contra
Batasuna, para el ex parlamentario de Sozialista Abertzaleak (SA)
Arnaldo Otegi, informaron fuentes jurídicas. Con anterioridad había
decretado la busca y captura de Jon Salaberria, quien no compareció
en la Audiencia Nacional a pesar de estar imputado en dos
causas.
Tras prestar declaración durante casi tres horas en un perfecto castellano y contestando a las preguntas del juez, del fiscal y de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), se celebró una vistilla del artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, tras la que el juez decretó para el ex parlamentario de SA prisión eludible con fianza de 400.000 euros.
El fiscal Jesús Alonso, tras consultarlo con su compañero Juan Moral, quien se ocupa de la causa seguida contra Batasuna, pidió al juez que decretara prisión incondicional por el importante papel que Otegi ha tenido en la creación del proyecto orgánico de ETA, para evitar la reiteración delictiva y para conjurar el riesgo de fuga. En este último argumento ha tenido especial importancia el que Jon Salaberria no compareciera ayer en la Audiencia Nacional.
Salaberria había sido citado ayer por Grande-Marlaska, junto al también ex parlamentario de la ilegalizada Batasuna Arnaldo Otegi, para declarar como imputados en el sumario en el que se investiga la subordinación de Batasuna a ETA y la financiación de la banda a través de las herriko tabernas.
Ayer por la tarde, en la sede de la Audiencia Nacional sólo se presentó Otegi acompañado de su abogada, la también ex parlamentaria Jone Goiricelaya.
Otegi aseguró ayer en la Audiencia Nacional que desconocía todo lo relativo a la financiación de esta formación y su relación con ETA y manifestó su respeto por las víctimas. Según informaron fuentes jurídicas, Otegi se pronunció así durante las casi tres horas que estuvo declarando ante el juez Fernando Grande-Marlaska, al que también dijo que desconocía la comisión nacional de herrikos, a través de la que supuestamente se financiaba la banda terrorista. Otegi realizó una declaración en perfecto castellano y no eludió ninguna pregunta de las partes. Se describió como un simple portavoz político y en ella que negó tener conocimiento de la financiación de Batasuna, así como de la comisión nacional de 'herriko tabernas', a través de la cual el fiscal considera que el partido ilegalizado controla estas entidades. La citación de Otegi y Salaberría en la causa de Batasuna se produjo a instancias del fiscal adscrito al caso, Juan Moral, de cara al futuro procesamiento de ambos, condición en la que se encuentran otros 39 encausados en el procedimiento.